Mostrando entradas con la etiqueta blu-ray. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta blu-ray. Mostrar todas las entradas

12 mar 2009

La pesadilla de Hollywood: ¿es sólo la recesión?

Por César Pérez Carballada




En la última entrega de los premios de la Academia, más conocidos como ‘Oscars’, el gran ganador resultó ser ‘Slumdog Millionaire’ una película inglesa basada en un libro hindú, que se llevó 8 estatuillas, incluyendo los premios a mejor película y mejor director.

La ceremonia de los ‘Oscar’, ensombrecida por la crisis económica, reflejó esta realidad en el guión y en las escenografías.

Inclusive la distribución de la película ganadora estuvo influida por la crisis, ya que fue distribuida en EE.UU. por Fox Searchlight, despues que Time Warner decidiera cerrar el estudio que tenía originalmente los derechos –Warner Independent Pictures- para afrontar la recesión ahorrando costes (y así se perdió la oportunidad de ganar los 200 millones de dólares que la película lleva recaudados en EE.UU.)

Después de 11 años de reinado, el DVD parece que ha agotado sus fuerzas. Según Nielsen, las ventas de nuevos títulos cayó más de un 20% en el último trimestre del 2008 en EE.UU. y según Digital Entertainment Group, las entregas de DVDs a los distribuidores en EE.UU. y Canadá cayeron más del 32% en el mismo período –el mayor declive desde el nacimiento del formato-.


Esto es para Hollywood una película de terror, un drama o una mezcla de los dos, ya que típicamente, los DVDs representan más de la mitad de los ingresos generados por una película.

Como resultado, los cuatro estudios grandes de Hollywood – Warner Bros de Time Warner, Paramount de Viacom, 20th Century Fox de News Corp y Walt Disney- reportaron caídas en sus ventas de DVDs. Ni siquiera el gran éxito de “The Dark Knight” -que se ha convertido en la 2da película que más ha recaudado en la historia en EE.UU. (la 1ra sigue siendo Titanic)- ha logrado salvar las ventas de Time Warner.

Indudablemente la recesión está afectando a casi todos los sectores de la economía, pero ¿es la única razón del declive de Hollywood?

La mayoría de los ejecutivos de la industria culpan a la economía. Por ejemplo, Jim Gianopulos, director general de Fox Filmed Entertainment, dice que el declive se aceleró en Octubre tras el empeoramiento de la crisis financiera; pero algunos se animan a dar una explicación distinta. Bob Iger, Consejero Delegado de Disney, ha comentado en el Financial Times: “es muy probable que esté ocurriendo una tendencia de largo plazo que no está relacionada con la situación de la economía actual”.

¿Quién tiene razón? ¿Es solo la recesión que afecta a todos o hay algo más?

Analicemos el tema un poco más en profundidad.

Hace casi exactamente 1 año, Toshiba anunciaba que se retiraba de la guerra por el estándar de los DVD de alta definición, dejando al Blu-Ray de Sony como el claro ganador.

Los que más festejaron este hecho (aparte de Sony, claro) fueron los estudios de Hollywood ya que –en su opinión- muchos consumidores estaban esperando el desenlace de esa guerra para decidirse a comprar a un reproductor de DVD de alta definición.

En aquel momento hicimos un análisis sobre el tema, para ver el estado de las ventas de DVDs y analizar cómo impactaría el DVD de alta definición.

Había dos conclusiones claras.

Primero, que los ingresos generados por los DVDs habían alcanzado su pico y comenzaban a declinar, aún cuando la recesión no había comenzado todavía.


Segundo, que el Blu-Ray estaba lejos de ser el salvador de la industria. ¿Por qué razón?

Básicamente porque los consumidores habían comenzado a apreciar otros atributos distintos de los ofrecidos por Blu-Ray.

Mientras que el Blu-Ray ofrece una mayor calidad visual, no todas las personas valoran esa calidad incremental, y menos a costa de cambiar su colección entera de DVDs.

Por otro lado, los atributos que busca un consumidor al ver una película en su casa son bastante evidentes: acceso inmediato (¿a quién le gusta esperar?) a la mayor variedad posible de películas (nada más frustrante que un catálogo limitado) por un precio razonable (¿por qué tengo que pagar mas?). Y si a eso le sumamos el hecho de no tener que desplazarse a un videoclub para buscar y devolver una película (evitando perder tiempo, exponerse al clima, etc.) aún mejor.

Un DVD de alta definición no brinda todos esos beneficios, sin embargo existe otra alternativa que sí lo hace: Internet.

Cada vez más consumidores buscan películas en Internet, ya sea en sitios legales o no. Según una encuesta realizada por la Fundación BBVA en España durante el 2008, un 44% de los usuarios de Internet se ha descargado películas o vídeos en los últimos 3 meses (porcentaje alto si se lo compara con el 52,9% que ha descargado música o el 47,4% que ha utilizado un servicio de mensajería instantánea).


¿Cuál es la consecuencia de todo esto?

Analizando los ingresos generados por los DVDs en el último año vemos que están lejos de revertir la tendencia que se insinuaba en el 2007, de hecho el declive se ha acelerado al caer un 7,3% en el 2008 vs. el año anterior.


Incluso cuando se consideran los demás ingresos, la caída es imparable, ya que el DVD de alta definición no alcanza a compensar la caída de ventas de los DVDs.


Tras un año completo del Blu-Ray como formato estándar, el DVD de alta definición solo ha llegado a representar el 3,4% de los ingresos totales en el 2008.

Incluso aquellos analistas que aceptan que el Blu-Ray logrará la masividad en el hogar durante los próximos años, prevén que los ingresos generados por ese formato en el 2011 serán solo 3,5 mil millones de dólares (billones de EE.UU.), para unos ingresos totales de tan solo 18,6 mil millones de dólares, ¡apenas superior al nivel de ingresos que tenía la industria 10 años antes!

Claramente la recesión económica está afectando la adopción del nuevo formato, pero la escasa receptividad del DVD de alta definición se comenzó a manifestar antes de que la crisis comenzara. Lo único que está haciendo la recesión es acelerar el proceso.

Con estas cifras a la vista, ¿cómo es que Hollywood no comienza a apostar en serio por Internet?

Los únicos intentos serios no provienen de Hollywood sino que son esfuerzos mixtos junto a empresas de TV, como es el caso de Hulu.com, propiedad de NBC Universal y News Corp (Fox).

Básicamente hay tres razones que, a pesar de ser inválidas, llevan a Hollywood a rechazar Internet:

- miedo a los grandes distribuidores: más del 40% de los DVDs en EE.UU. se venden en Wal-Mart, por lo cual los estudios temen una reacción del gigante. De lo que no se dan cuenta es que la venta de DVDs ya ha comenzado a bajar sin que Wal-Mart haga nada, además, ¿qué piensan los estudios que hará Wal-Mart cuando los DVDs continúen bajando? Simplemente les dará la espalda, entonces ¿por qué no adelantarse y tratar de recuperar los ingresos que inevitablemente se esfumarán?

- miedo a innovar con nuevas ventanas de distribución: Hollywood estrena las películas en olas sucesivas primero en cines, luego TV de pago, luego venta de DVDs, etc; ese ciclo dura unos 2-3 años y permite maximizar los beneficios que obtiene de cada película, por eso los estudios se muestran temerosos a cambiarlo. De hecho rechazaron inicialmente a la TV en los 1950s por la misma razón, e incluso llegaron a rechazar al DVD en 1997, aunque ambos formatos luego demostraron que eran excelentes maneras de expandir el negocio. ¿No existe la posibilidad de que con Internet ocurra lo mismo?

- miedo a los piratas: Hollywood, al igual que sus primos cercanos las discográficas, está aterrorizado por los piratas. Desde hace varios años están afrontando una creciente distribución ilegal a través de Internet y no han encontrado una mejor manera de contrarrestar esta tendencia que acusando y llevando a los tribunales a sus propios consumidores. No se dan cuenta que, en gran parte, esa distribución ilegal es la respuesta de los consumidores a la falta de opciones legales. Si Hollywood ofreciera una opción legal con todos los títulos posibles a un precio asequible, un gran porcentaje de consumidores definitivamente la elegiría.

********

Tal como concluimos hace un año, podemos afirmar que el sucesor del DVD no será el Blu-Ray o cualquier otro formato físico. Será Internet.

Los consumidores ya han decidido, dependerá de los estudios el aceptar un nuevo rumbo ligado a Internet o condenarse a si mismos a la extinción como le está ocurriendo a las discográficas.

La diferencia con la industria de la música es que ellos ya sufrieron este proceso hace varios años y no supieron reaccionar, Hollywood todavía cuenta con algo de tiempo a su favor, aunque la cuenta regresiva ha comenzado.

¿Sabrá reaccionar a tiempo?

Deje su opinión aquí


________________________________________________________________________

- Suscríbase al reader o reciba los artículos por correo
- Compartir este artículo con un amigo


Autor: César Pérez Carballada
Artículo publicado en
http://www.marketisimo.com/

Continuar leyendo el resto del artículo...


18 mar 2008

La verdadera esperanza de Hollywood es Internet (y Blu-ray no es el salvador)


Hace unas semanas Toshiba anunció que se retiraba de la guerra por el estándar de los DVD de alta definición, dejando al Blu-Ray de Sony como el claro ganador.

Los estudios de Hollywood están de enhorabuena. En su opinión muchos consumidores estaban esperando el desenlace de esa guerra para decidirse a comprar un reproductor de DVD de alta definición.

¿Realmente los consumidores piensan así?

La verdad es un poco más dura para Hollywood: el consumidor promedio no percibe beneficios incrementales en el DVD de alta definición que justifiquen tirar un reproductor de DVD para comprar otro nuevo.

Está claro que la calidad de la imagen es mucho mayor, el sonido también, ¿pero es eso lo que buscan los consumidores?

Basta reflexionar brevemente para darse cuenta que el consumidor promedio busca en realidad otra cosa: acceso inmediato (¿a quién le gusta esperar?) a la mayor variedad posible de películas (nada más frustrante que un catálogo limitado) a un precio razonable. Y si a eso le sumamos el hecho de no tener que desplazarse a un videoclub para buscar y devolver una película (evitando perder tiempo, exponerse al clima, etc.) aún mejor.

Un DVD de alta definición no brinda todos esos beneficios, pero existe otra alternativa que sí lo hace: Internet.

Cada vez más consumidores buscan películas en Internet, ya sea en sitios legales o no, y los primeros escasean. Según una reciente encuesta del ministerio de cultura de España* entre Marzo del 2006 y Febrero del 2007 casi el 20% de las personas que accedieron a Internet se descargaron películas gratuitamente.

En los jóvenes entre 15 y 24 años (el ‘segmento objetivo’ de Hollywood) ese porcentaje crece hasta el 32%.

Es decir que uno de cada tres jóvenes se ha descargado películas gratis de Internet entre marzo de 2006 y Febrero de 2007, aún con los limitantes de ancho de banda de hace 1 año!

De hecho podemos intuir lo que ocurrirá en los próximos años cuando la velocidad de descarga ya no sea un problema al observar los datos relativos a la música: casi la mitad de los jóvenes han descargado música en forma gratuita de Internet durante el período analizado!



Considerando esas cifras resulta sumamente llamativa la falta de actividad que muestran los estudios de Hollywood en Internet.

Parece que están imitando su propia conducta de hace 50 años.

A finales de los 1940s cuando la TV estaba naciendo, Hollywood se negó a aceptar y aprovechar el nuevo medio. En 1951 NBC se convirtió en la primera cadena nacional de TV en EE.UU. y en pocos años más, 50% de los hogares tenían un aparato de TV.

No fue hasta mediados de los 1950s, cuando la audiencia de los cines comenzó a declinar inevitablemente, que los estudios de Hollywood aceptaron emitir sus películas en la TV.

Aún así, al principio solo le permitían a las estaciones de TV emitir las películas estrenadas antes de 1938 (películas con más de 15 años de antigüedad).

La primera película emitida en forma completa en prime-time en TV fue el Mago de Oz de MGM, que fue emitida por CBS el 3 de noviembre de 1956, unos 17 años después de ser estrenada en cines!

Incluso Hollywood tuvo que enfrentar y ceder ante dos huelgas de escritores por razones similares: en 1960 por los derechos de los contenidos en TV, en 2007 por lo derechos de los contenidos en Internet.

Así como negó la TV, Hollywood hoy niega Internet.

Esto ocurre a pesar de que, a lo largo de la historia, cada vez que Hollywood lanzó una nueva forma de distribución más conveniente para los consumidores, desde la TV hasta el VHS y el DVD, las ventas se incrementaron, porque cada nuevo formato permite que los estudios moneticen nuevamente su larga librería de títulos ya editados.

Con Internet los estudios no solo podrían aumentar las ventas, también podrían incrementar su rentabilidad: al eliminar la fabricación, transporte y distribución física, pueden aumentar la rentabilidad en ~18% (unos 3 dólares por cada 16 dólares del precio de venta de una película en EE.UU.).

Incluso los ejecutivos de Hollywood admiten en privado que sus hijos ya no compran CDs o DVDs: los bajan de Internet.

Ante estos hechos tan evidentes, ¿por qué Hollywood le da la espalda a Internet?

Básicamente existen tres razones por las cuales los estudios de Hollywood se han mostrado reticentes a distribuir sus películas en Internet:

1) miedo a los grandes distribuidores

La principal fuente de ingresos para Hollywood actualmente es la venta de DVDs. Casi la mitad de los ingresos totales provienen de la venta o alquiler de DVDs.

En EE.UU. los DVDs generaron 23,4 mil millones de dólares (billones de EE.UU.) en el 2007, mientras que los cines generaron solo 9,6 mil millones (billones de EE.UU.), es decir, menos de la mitad.

La mayor parte de los DVDs se vende a través de grandes distribuidores. Por ejemplo, en EE.UU., el 40% de las ventas globales de DVDs están concentradas en Wal-Mart.

Parecería que los estudios están a merced de Wal-Mart.

Cualquier intento medianamente serio de prescindir de Wal-Mart implicaría un gran riesgo ya que ese gran distribuidor podría, como represalia, reducir el espacio dedicado a DVDs con la consiguiente reducción de ventas.

Este argumento podría rebatirse señalando que Wal-Mart depende de los DVDs para atraer a consumidores de ingresos medios y medios-altos que compran también el resto de sus productos.

Incluso se podría innovar, con métodos de distribución intermedios, como el que proponen algunas empresas: kioscos de grabación digital en las grandes superficies que permiten a los usuarios elegir entre un gran catálogo de películas que luego se pueden reproducir en el hogar (eliminando la necesidad de un DVD y la consiguiente restricción en el catálogo por la falta de espacio). Sin ser la mejor opción, podría ser un intermedio.

Finalmente, la principal razón por la cual los estudios no deberían tener miedo a Wal-Mart es que no es necesario una represalia: las ventas de DVDs ya han comenzado a caer por sí solas:


Este hecho debería haber hecho sonar las alarmas en todos los estudios: el mercado esta cambiando sin esperar a que ellos cambien.

2) miedo a innovar nuevos modelos de negocio

Tradicionalmente, Hollywood ha maximizado sus beneficios distribuyendo sus películas en un sistema de ventanas: primero se estrena las películas en cines, luego de un tiempo se pasa a vender las películas en TV de pago (pay-per-view), luego se venden en DVDs, más tarde se alquilan en video-clubs, para luego emitirse por canales de cable/satélite y finalmente por TV abierta.

Ese ciclo dura unos 2-3 años y permite optimizar los beneficios que obtiene cada película.

Por esa razón Hollywood tiene tanto miedo de cambiarlo.

Como vimos, esto ya ocurrió en los 1950s cuando la irrupción de la TV causó pánico, ya que los estudios pensaron que destruiría el negocio de los cines.

Incluso volvió a ocurrir con el DVD. En 1997, cuando el nuevo formato estaba por ser lanzado, tres de los principales estudios, Paramount, Disney y 20th Century Fox, se opusieron: estaban preocupado que los 18 dólares que conseguían con cada DVD canibalizara las ventas de video-casetes a los video-clubs, que vendían a 65 dólares cada no. Ninguno de los estudios está orgulloso de aquel comportamiento hoy en día.

Muchos especialistas de la industria están convencidos que este sistema de ventanas acabará siendo eliminado. De hecho, los estudios ya han reducido la duración de cada ventana, y en varios casos han optado por lanzar las películas en forma simultánea en todos los canales.

En cualquier caso, este sistema de ventanas es una bendición para los piratas, lo que nos lleva a la tercera razón.

3) miedo a los piratas

Hollywood está aterrorizado de los piratas. Al igual que sus primos cercanos, las discográficas, desde hace varios años están enfrentando un creciente número de distribución ilegal, especialmente a través de Internet.

Al igual que las discográficas, Hollywood tampoco ha encontrado una mejor manera de contrarrestar esta tendencia que acusando y llevando a los tribunales a sus propios consumidores.

Finalmente, como las discográficas, los estudios de Hollywood no se dan cuenta que el incremento desmesurado de distribución ilegal en Internet es, en muchos casos, una respuesta de los consumidores a la falta de opciones legales.

Es decir, no es que la mayoría de los consumidores hayan decidido de la noche a la mañana conseguir películas en forma ilegal. Es que los beneficios de conseguir películas en Internet son tantos que incluso llegan a sobrepasar el miedo a una potencial sanción o ideal ético.

No es que los consumidores quieran comportarse de manera ilegal, es que Hollywood no les deja otra opción!

La diferencia con la industria de la música, es que esto ya les ocurrió hace unos años y no supieron reaccionar, Hollywood cuenta con unos años a su favor.

¿Sabrá reaccionar a tiempo?

Quizás le dejen el plato servido a Apple, quien está ansioso por replicar el éxito que logró con iTunes en el mercado de las películas.

Internet puede parecer un mundo desconocido y peligroso, pero también puede ser una gran oportunidad: los consumidores adoran la idea de no tener que ir a un video-club a elegir una película en un catálogo limitado pagando penalidades por retrasos, y en su lugar tener acceso inmediato a cualquier película que se quiera, desde el último estreno comercial a la más oscura versión de un cineasta ruso.

El sucesor del DVD no será el Blu-Ray o cualquier formato físico similar. Será Internet.

Los consumidores ya han decidido, dependerá de los estudios el aceptar ese rumbo o condenarse a si mismos a la extinción como le está ocurriendo a las discográficas.


Autor: Cesar Perez Carballada
Artículo publicado en
http://www.marketisimo.com/
Para recibir estos artículos por correo:
haga click aquí


* Encuesta de hábitos y prácticas culturales 2006-2007, tamaño de la muestra: 16.408 personas (nacional), nivel de confianza: 95% ± 0,84%

Continuar leyendo el resto del artículo...


3 feb 2008

Deja vu: Blu-ray, HD DVD y la guerra de las cintas


En toda guerra de formatos hay ganadores y perdedores.

Parece que en la más reciente, luchando por ser el sucesor del DVD, se ha definido un ganador.

Hace unas semanas, el estudio Warner Bros anunció que abandonaba su apoyo al HD DVD de Toshiba para avalar en forma exclusiva a su competidor: el Blu-ray de Sony.

De esta manera Sony logra el apoyo de la mayoría de los estudios, casi garantizando un triunfo definitivo:


Esta no es la primera ni la última guerra de formatos, ya que desde que 1886 cuando Thomas Edison se peleaba con Emile Berliner por el formato de los primeros cilindros de cera para almacenar música, la industria del entretenimiento ha pasado por tumultuosas batallas.

Para Sony esta victoria tendrá gusto a venganza, ya que perdió una guerra similar en los 80s cuando defendía su Betamax frente al VHS de JVC.

Además demuestra que Sony aprendió una importante lección.

Todo empezó en Diciembre de 1974, cuando Sony invitó a unos directores de JVC para discutir el futuro del mercado de cintas de vídeo, mercado en el cual estaban colaborando desde hacía un tiempo.

En esa reunión Sony mostró un prototipo del Betamax, pero la gente de JVC declinó la invitación a sumarse al formato.

De hecho, JVC estaba preparando en secreto su propio formato, cosa que Sony no sabía.

Así comenzó la guerra.

Detrás de ambos se encolumnaron los principales fabricantes de electrónicos: del lado de Betamax estaban Sony, Toshiba, Sanyo, NEC, Aiwa, y Pioneer; del lado de VHS estaban JVC, Matsushita (Panasonic), Hitachi, Mitsubishi, Sharp, y Akai.

Al final, ¿por qué ganó el VHS de JVC?

VHS no era el mejor producto. De hecho Betamax tenía marginalmente mejor calidad de imagen y sus cintas eran más pequeñas.

JVC no lanzó el VHS hasta 1976, con lo cual Sony Betamax tuvo una ventaja de 1 año en el mercado durante el cual disfrutó un monopolio con el 100% de los títulos editados.

Algunos dicen que la razón fue que Sony Betamax no incluía títulos para adultos. Pero esa afirmación puede ser rebatida por dos razones: editoras como Playboy editaron sus títulos en ambos formatos durante los 70s y 80s, y además, la industria del cine de adultos no es lo suficientemente grande como para decidir una guerra de formatos.

El problema real fue que Sony se enfocó en el producto en lugar de pensar qué quería el consumidor.

¿Qué buscaban los consumidores?

Algo muy simple: poder grabar sus programas o películas favoritas.

Para ello necesitaban una cinta que durase lo suficiente. Y en ese atributo VHS era mejor: inicialmente podía grabar hasta 2 horas mientras que Betamax grababa solo 1 hora.

¿Para qué comprar un Betamax que "no duraba lo suficiente como para grabar una película completa"?

Los ingenieros de Sony habían considerado ese atributo, pero para lograr mayor duración debían hacer correr la cinta a menor velocidad, lo que degradaba la definición de la imagen e incrementaba el ruido del vídeo y como además ya estaban vendiendo una cinta de vídeo profesional para estudios de TV (el “U-Matic”) que duraba 1 hora, decidieron que eso era lo mejor.

Pero el consumidor promedio prefería grabar un programa entero aunque tuviera que sacrificar un poco la calidad de la imagen.

Con el tiempo ambas compañías lanzaron más opciones lo cual incrementó la confusión en el mercado y los consumidores hicieron lo que hacen todos los consumidores cuando reciben mensajes confusos y contradictorios: desecharon los nuevos mensajes y se quedaron con la idea original “Betamax tiene mejor calidad y VHS me permite ver un programa entero, entonces me compro un VHS”.

Aún cuando Sony posteriormente modificó el Betamax para que tuviera una mayor duración de grabado, JVC siempre se mantuvo al frente. Eventualmente Betamax III permitía grabar hasta 5 horas, pero a esas alturas el VHS SLP/EP duraba hasta 10,6 horas, reafirmando su imagen de “mayor duración”.

Son dos principios básicos del posicionamiento:

1) es preferible ser el primero en la mente del consumidor que el primero en el mercado

2) una vez que una marca está claramente asociado a un atributo en la mente, es casi imposible cambiarlo.

Así Betamax tuvo 1 año de ventaja en el mercado, pero lo desperdició, ya que su competidor fue el primero en llegar a la mente de los consumidores asociada al atributo correcto.

De esta manera, aunque Betamax era “mejor” producto (más calidad de imagen), VHS tenía un “mejor” atributo (mayor duración de grabado) en la mente de los consumidores.

En este anuncio (en inglés) se puede ver como Sony insiste en que Betamax tiene mejor imagen que VHS, lo cual era muy importante para los ingenieros de Sony, pero irrelevante para el consumidor:




De hecho, en 1979 surgió un nuevo competidor, el Video 2000, fabricado por Philips y comercializado principalmente en Europa. El V2000 era mejor producto que el Betamax o el VHS, pero llegó tarde al mercado y el VHS ya estaba fuertemente posicionado en la mente de los consumidores. El V2000 fue la primera víctima de la guerra y se dejó de fabricar a mediados de los 80.

Sony Betamax fue perdiendo paulatinamente cuota de mercado y de tener el 100% en 1975, en 1981 ya había caído al 25%, lo cual provocó que cada vez más estudios editaran títulos exclusivamente en formato VHS, lo cual aceleró la caída de Betamax.

En 1980 Sony comenzó a reducir agresivamente su precio, entablando una batalla de precios pero estos descuentos ya no cambiarían la trayectoria de la guerra.

El último Sony Betamax fue fabricado en Japón en 2002 aunque ya desde 1988 Sony había reconocido la derrota cuando comenzó a fabricar reproductores también en formato VHS (a esa altura, VHS representaba el 95% del mercado).

De la guerra de los formatos Sony aprendió una importante lección: hay que escuchar al consumidor.


Así diseñó su Blu-ray con una capacidad de almacenamien-to -el equivalente a la “duración” en las viejas cintas- de 50 Gb mientras que su competidor, el HD DVD de Toshiba, solo puede almacenar 30 Gb (vs. 8,5 Gb de un DVD común).


Esa diferencia permite al Blu-ray grabar 23 horas mientras que el HD DVD solo graba 13 horas (vs. 3 horas en un DVD común).

El Blu-ray, por su tecnología, es más caro pero como almacena más, el coste por Gb es casi igual. Los discos tienen el mismo precio, por lo cual el coste por Gb de Blu-ray es menor. Lo mismo que le ocurría al VHS vs. el Betamax.

Aparte de esa diferencia, ambos formatos son casi idénticos (hasta los discos tienen exactamente el mismo tamaño).

Desde el primer día los consumidores prefirieron el Sony Blu-ray. De hecho la cuota de mercado de Blu-ray representa 63% del mercado en EE.UU., 74% en Europa y casi el 90% en Japón*.

De la guerra de los formatos, Sony también aprendió la ventaja de ciertos apoyos estratégicos. Por esa razón, en 1989 compró el estudio Columbia (hoy Sony Pictures), con lo cual fue capaz de ofrecer desde el 1er día títulos editados exclusivamente con su formato, como por ejemplo Casino Royale, Spider-man y Resident Evil.

Así Sony logró acelerar la preferencia por Blu-ray:


Otro movimiento estratégico de Sony fue incorporar su formato a la Playstation 3 para alcanzar economía de escala y reducir el precio, forzando a Toshiba a formar una alianza con Microsoft y su Xbox.

Aparentemente Toshiba tratará de salvar su producto reduciendo el precio final en un 40-50%, pero como han demostrado otras guerras de formato anteriores, el precio no define la guerra, y menos cuando el curso de la misma ya está prácticamente definido.

Mientras tanto, esperemos que los estudios no estén cometiendo el mismo error que cometieron las compañías discográficas ya que mientras se pelean por el formato no facilitan que Blu-ray ni HD DVD puedan grabar.

De hecho, la primera señal de alarma ya ha sonado: las ventas totales de DVDs cayeron 4,8% en 2007**, la primera caída en las ventas en la historia del DVD…

Conclusión, antes de lanzar un producto o servicio elija cuidadosamente el atributo con el cual lo va a asociar. Es decir, defina correctamente el posicionamiento del producto.

Para hacerlo, no piense en el producto, elija el atributo más apreciado por el consumidor. Esto es importante porque una vez que su producto se asocie a un atributo en la mente del consumidor, luego resultará casi imposible cambiarlo.



ACTUALIZACIÓN: El día 19 de Febrero de 2008, Toshiba anunció oficialmente su renuncia definitiva al formato HD DVD. Esta renuncia se vio acelerada por la decisión de varias cadenas de distribución, como Wal-Mart (el mayor vendedor de DVDs en EE.UU.), Target, Best Buy, Netflix y Blockbuster, de solo vender el formato Blu-ray.



Autor: Cesar Perez Carballada
Artículo publicado en www.marketisimo.com
Para recibir estos artículos por correo: haga click aquí



* la diferencia no se justifica por las fechas de lanzamiento ya que fueron casi simultaneas: HD DVD en Marzo 206 y Blu-ray en junio 2006
** de acuerdo a estimaciones preliminares de Adams Media
Fuente: cuotas de mercado de los estudios, Box office Mojo; The Economist; cuotas de mercado blu-ray y HD DVD, para EE.UU. Nielsen 29-12-2007, para Europa OCC y GFK 24-11-2007, y para Japón GFK Agosto 2007; evolución de cuota de mercado en EE.UU., Nielsen VideoScan: First Alert Data

Continuar leyendo el resto del artículo...


Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...